La rinosporidiosis en perros es una infección fúngica que afecta a la nariz. Provoca tumores que parecen pequeñas coliflores.

La enfermedad es zoonótica. Esto significa que puede transmitirse de perros a humanos.

Técnicamente, el organismo que causa la enfermedad se llama Rhinosporidium seeberi.

Afortunadamente, esta enfermedad es bastante rara en Estados Unidos.

Si observa signos de rinosporidiosis en su perro, acuda a un veterinario para que le haga un diagnóstico y un tratamiento adecuados.

Esto es lo que debe saber sobre los síntomas, las causas y los tratamientos de esta enfermedad.

Síntomas de la rinosporidiosis en perros

Esta enfermedad produce una amplia gama de síntomas. Por ejemplo, algunos de los síntomas más comunes son:

  • hemorragias nasales
  • Problemas respiratorios
  • estornudos
  • Nariz hinchada
  • Crecimientos alrededor de la nariz (que parecen coliflores)

Causas de la rinosporidiosis en perros

La causa de esta afección es la infección por un hongo. Por ejemplo, algunas de las formas en que un perro puede entrar en contacto con el hongo incluyen:

  • Suelo contaminado
  • Vegetación podrida
  • Agua estancada

Por lo general, los perros con un sistema inmunitario débil son los que corren más riesgo de padecer esta enfermedad. Además, los perros muy jóvenes y muy viejos suelen desarrollar la enfermedad.

Tratamientos de la rinosporidiosis en perros

En primer lugar, el veterinario le preguntará por los síntomas de su perro. En segundo lugar, le preguntará por cualquier circunstancia en la que su perro haya podido entrar en contacto con el hongo.

En tercer lugar, se llevará a cabo una exploración física completa. Incluirá análisis de sangre y orina.

Por lo general, será necesario realizar una biopsia de cualquier crecimiento para confirmar la enfermedad.

Normalmente, el tratamiento comienza con la limpieza de la zona infectada. Una intervención quirúrgica posterior puede eliminar cualquier crecimiento.

Además, puede utilizarse medicación antifúngica. Como siempre, si el veterinario receta algún medicamento a su perro, asegúrese de seguir las instrucciones de dosis y frecuencia correctas. Además, complete todo el tratamiento.

Por último, recuerde que más vale prevenir que curar. Mantenga a su perro alejado de las zonas contaminadas.

¿Ha atendido alguna vez a un perro que sufriera esta enfermedad? ¿Cómo ayudó su veterinario a la recuperación de su perro? Háganoslo saber en la sección de comentarios más abajo.